miércoles, 1 de diciembre de 2010

La juventud comprometida


Dijo Salvador Allende que “ser joven y no ser revolucionario es una contradicción hasta biológica”. Los nicaragüenses saben mucho de revoluciones, y aunque los jóvenes de ahora no vivieron la Revolución Sandinista hace 30 años, han librado y libran otras muchas otras batallas contra las dificultades diarias.

Su compromiso con la sociedad nicaragüense, tanto con los que vienen por detrás como con aquellos que en otro momento lucharon por los jóvenes de ahora, me da mucha envidia sana.

Hemos compartido varios encuentros con jóvenes nicaragüenses, de distintos ámbitos, para conocer sus inquietudes y su organización, que nos han demostrado el peso que pueden llegar a tener en la toma de decisiones.

El lunes 22 de Diciembre nos reunimos en Estelí con los trabajadores, todos recién licenciados universitarios, de la Factoría del Conocimiento, un proyecto de ASDENIC (Asociación para el Desarrollo local de Nicaragua), a través de Ibercotec, la Red Iberoamericana para la Cooperación Tecnológica, y financiado por las Universidades Populares de Extremadura, entre otras.

La Factoría del Conocimiento tiene el fin de formar o capacitar, por medio de distintas vías, a la sociedad nicaragüense, centrándose en grupos vulnerables como los niños, comunidades rurales...

Entre algunos de los resultados de la Factoría del Conocimiento destacan las micropíldoras, vídeos de un minuto de duración que utilizan un lenguaje sencillo y directo para transmitir una idea o concepto, de forma que pueda llegar a un gran número de personas. Tratan temas variados como desarrollo local, la salud infantil o la educación ambiental. Podéis ver algunas en www.micropedia.tv.

Otro proyecto en el que están trabajando en la actualidad es una Guía de Buenas Prácticas para una agricultura sostenible, de forma que se garantice la soberanía y seguridad alimentaria, para intentar llegar de forma sencilla a los campesinos del país .

En un encuentro en Estelí con las Juventudes Sandinistas conocimos cómo se organizan y reivindican, y nos dimos cuenta del alto asociacionismo que existen entre los jóvenes del país. Aquí los jóvenes se han ganado su posición en la toma de decisiones gracias a la movilización que han tenido cuando han visto vulnerados sus derechos, tal y como nos contaron los universitarios de la UNEN, la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua, cuando se manifestaron en contra de la abolición del derecho constitucional a que la universidad nicaragüense recibiera el 6% del presupuesto general del país. O de su papel en la Cruzada Nacional de Alfabetización, en los años 80, en la que se pasó de un índice de analfabetismo del 53% al 11%.

Hasta la Asamblea Nacional de Nicaragua han llegado los jóvenes, como es el caso de las diputadas Ocampos y Rivera, del FSLN, con quienes tuvimos la oportunidad de conversar y preguntar todas nuestras inquietudes sobre la implicación de los jóvenes en la política.

En fin, la juventud nicaragüense es un ejemplo de iniciativa y buena organización, que entiende la importancia de su acción para el desarrollo de país. Ojalá podamos llevar un poquito de ellos a nuestra Extremadura.

2 comentarios:

  1. Por supuesto que nos llevaremos algo de esta tierra y no poco, este es un viaje que marca y de eso empezaremos todos/as a ser conscientes mínimo después de un par de meses, una vez que le demos tiempo a los conocimientos senciones, vivencias...a que se asienten.
    Un besazo

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  2. lo que hace la ignorancia... yo, de lo que había escuchado de nicaragua, me hacía una imagen de un país empobrecido, preocupado poco más q del día a día, y me encanta leer el compromiso social que entrañan todas las personas con las que os topáis...q bueno!!!

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